En la víspera de su nuevo viaje a Estados Unidos, el Presidente anunció que está negociando «una ayuda» del gobierno de Trump. Un préstamo aprobado por el Congreso requiere un tiempo que Milei ya no tiene, por eso surgió la versión del Fondo de Estabilización del Tesoro. Sólo se usó una vez para salvar a un país extranjero del default: México en 1995 y Uruguay en 2002. Solo en el primero fue del tamaño que se discute hoy para Argentina.
En un intento por recuperar la ofensiva y tratar de generar algo de confianza tras gastar más de mil millones de reservas en sólo dos días, el presidente Javier Milei contó el viernes pasado que su Gobierno está negociando «una ayuda» económica con su aliado norteamericano, Donald Trump. Dijo que están «muy avanzados», pero reconoció que estas cosas «demandan tiempo». No es inusual que Washington entregue paquetes masivos de ayuda financiera a sus socios en el mundo, pero eso requiere pasar por el Congreso. No sólo Trump ha demostrado que prefiere esquivar sus mayorías republicanas ajustadas si puede, sino que Milei y especialmente el BCRA no tienen tiempo para esperar los largos procesos legislativos del Capitolio.
Por eso, empezó a sonar con fuerza la opción de utilizar el Fondo de Estabilización del Tesoro, una herramienta del Gobierno creada después de la crisis del 30 para enfrentar las crisis. Dos veces se utilizó para salvar a un aliado del default: México en la crisis de tequila en 1995 (USD 20.000 millones) y Uruguay en 2002 (USD 1.500 millones). Sin embargo, sólo en el primer caso se trató de un préstamo de las dimensiones que se discute hoy en Argentina.
fuente: el destape web